Si, lo se, todos estamos deseando comenzar las vacaciones, descansar y disfrutar, sin embargo mucho ojo, ya que todos estamos expuestos al estrés prevacacional y posvacacional. Del estrés postvacacional ya hablaremos en septiembre, centrémonos ahora en el prevacacional.
El estrés prevacacional lo sufrimos los días previos a la vacaciones, ya no estamos tan motivados a trabajar, nos apretamos el cinturón ¡todo por unas merecidas vacaciones!, pero de manera que dejamos de cuidar nuestra salud abandonando el gimnasio, la visita al médico (ya lo haré en septiembre), la terapia… todo con tal de “darnos unas merecidas vacaciones”. Esta excesiva contención provoca que acabemos más estresados que relajados cuando nos encontremos de camino a nuestra ansiadas vacaciones…
Fíjate que las cifras de personas con estrés en las ciudades durante periodos prevacacionales ascienden a más de 70%
Claro, eso no es todo, si estás con una ansiedad por las nubes por irte y desconectar pero te vas con familia o amigos puede que tus idílicas vacaciones sean más un campo de batalla que otra cosa.
Y ¿qué podemos hacer para prevenir este estrés prevacacional?:
1º No lo vivas los meses previos como un todo (estoy de vacaciones) o un nada (estoy trabajando o buscando trabajo), todas las semanas busca y encuentra pequeñas satisfacciones.
2º Ve con la disposición abierta a que pase lo que tenga que pasar, por estar de vacaciones no va a ser todo idílico.
3º Haz acuerdos con tus acompañantes antes de salir, por ejemplo puedes pactar cuando iréis todos juntos y cuando podréis tener tiempo a solas o en pareja
4º Sigue cuidando tu dieta, de acuerdo, estás de vacaciones, pero si nos vamos al todo vale, la vuelta a la restricción va a ser más dura, por lo que ponte algún límite, aunque sea pequeño, tu autoestima te lo agradecerá.
5º Piensa en algo divertido o gratificante que te gustaría hacer después de las vacaciones, de manera que ya nos vayamos motivando e incentivando la vuelta a casa.
Sobre todo piensa que tienes muchos momentos para disfrutar, ¡asegúrate de ello!.
La hormiga es sabia, pero no lo suficiente para tomarse unas vacaciones. Clarence Day